21/9/14

La edad y la maternidad.


Cuando somos pequeños y tenemos que hablar de madres, siempre tenemos en mente a nuestra madre: una mujer mayor, casada, con o sin trabajo pero a resumidas cuentas, pensamos en una mujer mayor porque solo las madres que son adultas pueden ser madres. Yo con mi primo cuando era más pequeño hice la prueba de preguntarle quiénes son las madres o quién podía ser madre, y me respondió que las madres son las que tienen hijos y que sólo las madres pueden ser madres. Y digamos que desde mi siempre la sociedad también ha tenido este concepto en la cabeza. Para ser madre, una madre decente, primero has de pasar por todas las etapas de la vida y una vez estés estable, tener hijos.
Yo por lo que parece, he ido un poco en contra del pensamiento que tiene la sociedad y que de cierta forma, yo también tengo, o al menos adquirí con más razón una vez que fui madre adolescente.


Siempre, y a veces no entiendo por qué, se liga la edad de una mujer con la maternidad, pero no con la maternidad en sí sino con lo tan buena madre que puede llegar a ser. Si tienes quizá entre 25-35 años (quizá 25 algo joven) puedes ser una buena madre ya que te encuentras en la flor de tu vida para desarrollar lo que viene siendo tu maternidad personal. No eres lo demasiado joven para ser una ignorante del tema o de la vida pero tampoco lo suficientemente vieja como para que  se te pase el arroz. Probablemente tengas los estudios acabados, tengas un trabajo, casa propia y un marido con el que estás felizmente casada y por eso os habéis decidido a tener un niño. O así es como mucha gente lo ve.
Si tienes entre 35-40 años... Cariño mío, estás ya un poco pasada para ser madre, ¿quieres que los amigos de tus hijos digan "ahí viene tu abuela a buscarte" y tu hijo responda que eres su madre? Pues esto es quizá lo que vaya a pensar cualquier persona cuando le digas que con 40 años vas a tener tu primer hijo.
Si te encuentras entre 20-25 años bueno.. Te pueden mirar algo mal, es cierto pero por así decirlo, eres adulta. Has pasado la etapa de adolescente y estarás intentando encontrar tu lugar en el mundo, quizá salga bien la cosa si eres madre a esta edad.
Pero ahora llega la tan criticada edad para ser madre. La etapa de los 15 a los 20 años.

Yo te voy a ser sincera y pensarás que quizá no tiene sentido lo que voy a decir o que soy falsa, hipócrita o lo que quieras decirme, pero por haber pasado por ello, lo digo. Yo soy de las personas que critico, de manera constructiva, tener un hijo con 15, 16, 17 años, pero quizá no por la misma razón que la mayoría del mundo hace.
Al ligarse la edad a lo tan buena madre que se es, tener un hijo cuando apenas estás creciendo en todos los sentidos no es bien visto. Cómo un crío va a cuidar de un crío, siempre se dice. Pero lo que en realidad la gente que no pasa por ello no sabe es que por un hijo se hace cualquier cosa, desde madurar hasta estudiar y trabajar para poder darle un futuro. Sí es cierto que cuando eres adolescente las oportunidades para criar a un hijo, en lo económico, son prácticamente nulas, ¿quién va a querer contratar a un crío de dieciséis años y quizá sin la ESO? Probablemente nadie, lo que esto impide que por si solo una pueda sacar adelante a su hijo. Pero hay que dejar claro lo que he dicho antes, un padre/madre (debería) hace cualquier cosa por su hijo, lo que sea para que este pueda comer aunque para la sociedad no sea del todo aceptado. Sin embargo, lejos de esto, un padre o una madre no se mide por el dinero que trae a casa sino por cómo es realmente con su hijo, la educación que le enseña y todos los valores que le puede transmitir, independientemente de cómo seas tú como persona. O al menos este es mi pensamiento.
Se puede ser un Cristiano Ronaldo y traer millones al año para mantener a tu hijo, pero si en vez de ser tú quien cuide y críe a tu hijo, es una señora a la que pagas con esos millones, perdóname cielo pero tú no eres padre ni eres nada, porque así tiene hijos cualquiera.

También es cierto que alguien que todavía no tiene claro lo que quiere hacer con su vida, poner en sus manos la vida de otra persona puede ser algo arriesgado, como ocurre con ciertas personas. Sin embargo, cuando la persona en la que es depositada esa otra vida tiene algo de conciencia, y más aún cuando sabe que dentro de 9 meses va a tener que ser la parte adulta de una pareja de dos o de tres, el ser una buena madre o un buen padre resulta más fácil. Hablando desde la voz de la experiencia he de reconocer que para mí el madurar de cierta forma para poder darle lo mejor a Noa, no me ha sido tan difícil, aunque en ocasiones una se desmadra como persona que es.
Eran dieciséis los años con los que tuve a Noa por primera vez en mis brazos y como ya expliqué en su día, cuando salí del paritorio para ir a mi habitación (aún volviendo sin Noa), yo vi mi vida y a todas las personas que esperaban en la habitación de una forma diferente porque aún sin ser muy consciente, en mi cabeza se estaban mezclando muchísimas emociones y datos que iba a tener que llevar a cabo en cuanto saliera de aquel lugar. Estaba madurando inconscientemente porque ya realmente no era sólo yo, éramos mi hija y yo, poniendo siempre en primer lugar su nombre. Desde aquel momento llegaron las inseguridades, los miedos, los manejos con un bebé, bebé que parecía que llevaba toda mi vida cuidando porque el instinto materno es lo que tiene, que tengas la edad que tengas (siendo alguien normal) te sale y esto juega a tu favor. Llegaron las preguntas, los ya no tan miedos del principio porque a medida que pasa el tiempo le vas cogiendo más confianza a la hora de cuidar a tu bebé porque cuando le ves crecer, crecer sano, sabes que es porque algo estás haciendo bien a pesar de que nadie estuviera a tu favor cuando decidiste ser madre. Cuando pasa uno, dos, tres años, años en los que aparte de cuidarle y darle todo tu amor y cariño posible, llega en momento de tener que meter esa educación o no educación que recibiste para que tu hijo el día de mañana sea una gran persona, reflejo de la gran persona que tu eres (en cuanto a humanidad y respeto se refiere) o esa persona que ni siquiera tú eres. Y cuando ni siquiera tú eres aquello que estás enseñando a tu hijo, cuando por ejemplo tú mientes y le enseñas a tu hijo que no ha de mentir, que eso no está bien, te conviertes automáticamente incluso en mejor persona por hacer que tu hijo sea la persona que tú no puedes ser (o no quieres).
Pero para muchas personas que deciden ser padres, digo que deciden porque siempre queda la opción del aborto aún teniendo descuidos, esto no les es tan fácil. Hay quien a pesar de madurar aquello que era necesario, una vez que ven que su vida avanza y que la vida que llevan sus amigos o que la vida que quisieran haber llevado se está yendo o está pasando por delante de sus ojos sin ser capaces de vivirla, deciden que quieren probar esa vida. Y la prueban. Y lo malo no está en probarla, todos los padres tengan la edad que tengan, 18 o 38 años se desmadran alguna vez porque el espacio propio en una persona es necesario para llevar una vida algo más calmada y equilibrada; lo malo se encuentra en cuando esa vida de desmadre es la que, una vez siendo padre/madre, quieres vivir. Cuando quieres o te olvidas de esa vida familiar para vivir una vida de fiesta, despreocupada, alocada y egoísta. Cuando quieres ser el adolescente que deberías haber sido y que por una decisión inconsciente no eres. Y sí, digo inconsciente porque no sabes dónde te estás metiendo, pero inconscientes son todas las decisiones que no son sabidas en propia piel. Pues ahí, cuando dejas de lado a ese pequeñín para dedicarte la vida a ti, ahí es cuando cualquier crítica que la sociedad haya hecho a tu edad maternal y a lo tan buena madre que puedes ser, puede ser "aceptada" (que tampoco porque como se suele decir, quien esté libre de pecado que tire la primera piedra, pero digamos que pueden llevar algo de razón porque has actuado justo como ellos querían que hicieras para demostrarte que tú por tu edad no puedes ser una buena madre). Sin embargo esto ocurre a cualquier edad y doy fe de ello. Madres con 40 años casi, con dos hijos que en lo único que piensan es en poder salir de fiesta y dejar a los niños con quien sea, ligar con chicos, beber mientras cuidan de sus hijos; o dejando esas cosas aparte, simplemente no atender la educación escolar de sus hijos al no ayudarles con la tarea o simplemente a no decirles que tienen que hacerla.

Lo que quiero decir y espero que se me haya entendido es que la edad no define la madurez de una persona, y mucho menos lo tan buen padre o tan buena madre que se puede ser. Ni los malos son tan malos, ni los buenos son tan buenos. Y no por ser madre adolescente soy peor madre que una persona con 30 años. Que sí, que quizá no tengo los medios necesarios para poder sacar adelante a mi hija porque ni tengo los estudios acabados ni un trabajo estable ni casa propia ni lo que ahora se supone que se necesita, una pareja estable, pero te puedo asegurar que lejos de esas cosas, cosas que de una forma u otra cubro (tengo lo necesario para que mi hija viva cómodamente y no le falte de nada), mi hija lleva una vida que muchos niños por desgracia no tienen. Tiene salud, una casa para vivir con todo lo que se necesita en ella, comida suficiente para que nunca diga "mamá, me he quedado con hambre", tiene ropa y una higiene personal, tiene una educación que poco a poco intento inculcarla, valores y sobre todo amor. Amor tiene a raudales por cualquier parte y de cualquier manera, empezando por los pequeños de la casa que la quieren como a una hermana, a mi abuela que la quiere como a una nieta, mis tíos que la quieren como si fuera su hija al igual que les pasa conmigo, tiene a su padre que también la quiere y a su respectiva familia con el mismo sentimiento, y me tiene a mí, tiene a su madre, madre que estaría dispuesta a lo que fuera con tal de que su hija lleve una vida decente y que nunca le falte de nada. Madre que no le importa pasarse una noche entera en vela porque su hija esté mala y tenga que vigilarla la fiebre cada dos, tres horas aunque ella esté durmiendo. Madre que siempre está ahí cuando necesita y aquella que comparte su cama prácticamente todas las noches cuando de repente, a las 5 de la mañana se despierta y se acerca pidiéndola por favor si puede comer en su cama. Una madre atenta en todos los aspectos pero eso sí, siempre dejando que su hija crezca como niña que es, que disfrute de lo que es la vida a su edad y que si se tiene que manchar o caer, pues que se manche y se caiga, hay cosas que son ley de vida.


He visto todo tipo de madres en los dieciocho años que tengo (casi diecinueve), tanto jóvenes como adultas, y he de decir que la edad no te define como madre, cada una es madre a su manera teniendo la edad que se tenga, pero que lo que la sociedad considera mala madre, las hay con veinte y con treinta años.



PD: Ahora que he empezado de nuevo el curso quizá lo de publicar entrada cada 10 días me sea algo imposible. Intentaré hacerlo como hasta ahora pero seguramente alguna entrada tarde algo más en salir. ¡Gracias por aguantarme! Jajaja pasa un buen día. (:

6 comentarios:

  1. Lo que mas me gusta de ti es que eres muy clara y no te da miedo decir que der madre adolescente no es algo bueno. Eres grande, sigue así que aqui tienes una seguidora para los restos!

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  2. ¿Has empezado ya la uni o que haces ahora? ¡Me encanta tu blog!

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    1. He tenido que repetir segundo porque el año pasado no me fue muy bien.
      Gracias!

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  3. Hola , te he dejado un premio en mi blog, me encanta como escribes y tu sinceridad, un saludo!!!

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    1. Ya llevo dos premios por tu parte, eres más que adorable en serio! Gracias!

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  4. Holaaa! yo fui mamá a los 25 y tengo 26 jaja osea hace 5 meses tuve a mi peqeña. La verdad es que no fue ni un emabarazo facil ni miradas faciles pero bueno... me da la vida mi bebe!

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