Querido tú:
Al igual que con la ropa, a medida que un bebé crece se le van quedando pequeñas otras cosas, como en este caso es la cuna.
Hace tiempo, recuerdo que hablando con una profesora porque un día tuve que llevar a Noa al hospital porque se cayó de la cuna. Me dijo que a los dos años le plantó a su bebé una cama para niños, de esas con barrera y bajitas para que aunque se caigan no se hagan mucho. Me aconsejó que hiciera lo mismo, pero en ese momento era imposible.
Ahora, con dos años y medio Noa tiene cama propia y no fue muy difícil escogerla, tenía clara la que le gustaba.